Elyzabeth, una aspirante a policía, despierta en una habitación que no es la suya. A su alrededor sólo encuentra muebles, cuadros y recuerdos que replican casi con exactitud la antigua habitación de una vieja amiga: Sharon.

Al levantarse y comprobar que, en efecto, todos los detalles se han cuidado al milímetro para crear una réplica casi exacta, una llamada desde el teléfono de la mesita interrumpe la calma.

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Una espeluznante y grave voz distorsionada suena desde el otro lado del teléfono. Aunque es difícil distinguir con claridad lo que dice la voz, su lapidaria última frase cae como un jarro de agua fría:

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"Este será tu último día de vida, Elyzabeth."

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¿Quién es el que está detrás de este secuestro? ¿Por qué parece que guarda un odio personal contra Elyzabeth? La única forma de averiguarlo parece ser encontrando la forma de salir de la habitación y buscar al culpable personalmente.